Siguiendo esta receta clásica de Arroz Rojo a base de Arroz Blanco Mahatma®, tomates y jalapeños podrás disfrutar de una deliciosa guarnición – por la Chef Pati Jinich.
Paso 1
En primer lugar, vierta en una batidora o procesador de alimentos los tomates junto con la cebolla, el ajo y la sal, y triture hasta obtener un puré suave. Pase este puré por un colador y dispóngalo en un vaso medidor de líquidos grande; anote la cantidad y reserve. Después, vierta 4 tazas de líquido de caldo de pollo en otro vaso. Mantenga los dos líquidos separados.
Paso 2
A continuación, caliente el aceite a fuego medio-alto en una cacerola, añada el arroz y cocine, removiendo frecuentemente, durante 3 o 4 minutos o hasta que el arroz adquiera un tono blanco lechoso. Vierta entonces el puré de tomate, mezcle suavemente y cocine durante aproximadamente 3 minutos, o hasta que el puré se oscurezca, espese y el arroz haya absorbido la mayor parte del puré.
Paso 3
Incorpore entonces el caldo de pollo y añada el perejil y los jalapeños encurtidos, además de las zanahorias, los chícharos y el maíz (si ha decidido incluirlos). Cocine todo junto durante unos 15 minutos, o hasta que se haya absorbido la mayor parte del líquido pero aún siga quedando algo de humedad en el sartén. En el caso de que se haya absorbido todo el líquido pero el arroz aún no se haya cocido ni esté tierno, añada 2 cucharadas de agua, tape de nuevo la cacerola y cocine durante 2 minutos más. Pasado este tiempo, retire el resultado del fuego y deje que repose, tapado, durante al menos 5 minutos.
Paso 4
A la hora de servir, esponje el arroz con un tenedor y disfrute su plato.
Arroz rojo es el nombre con el que se conoce al arroz rojo mexicano en algunos países de América Latina. Esta guarnición forma parte de casi todas las comidas familiares, especialmente en los hogares mexicanos. Los granos largos del arroz blanco ayudan a absorber todos los sabores resultantes de la combinación del puré a base de tomate y el caldo de pollo, a la vez que sus granos se mantienen separados, ligeros y conservan su característica textura esponjosa.
Para potenciar los sabores, te recomendamos que cocines los granos en un caldo sabroso en lugar de agua. Si no tienes ningún caldo a mano, conseguirás un efecto similar si calientas agua y disuelves en ella un cubito de caldo de pollo. Al combinar el caldo con los tomates colados, la cebolla y el ajo, te sugerimos que pruebes el resultado y ajustes la cantidad de sal para que tu plato de arroz esté bien sazonado.
Esta receta de la chef Pati Jinich es aún más sabrosa, ya que se añaden al arroz chiles jalapeños en vinagre. Realmente puedes añadir cualquier verdura que tengas en la nevera, ¡o en la despensa! ¿Tienes alguna lata de maíz o chícharos? Agrégala para darle más sabor.
Además de ser una sabrosa guarnición, el arroz rojo también es ideal para rellenar burritos o tacos. Prepara una cantidad de arroz extra y guárdala en la nevera para añadir un toque especial a tus comidas.
Siempre que vayas a preparar una receta de pollo, aunque solo vayas a utilizar las pechugas, te sugerimos que compres el ave entera. Utiliza los trozos que necesites para tu receta y guarda el resto para elaborar en otro momento un rico y sabroso caldo.
El resto de ingredientes que necesitarás para añadir nutrientes y sabor a tu caldo son las verduras (las sobras funcionan muy bien para preparar caldo casero) como por ejemplo apio, zanahorias y cebollas, o ingredientes secos como tomillo, romero, granos de pimienta, sal al gusto y, finalmente, agua. Combina todo en una olla de fondo grueso, un horno holandés o una olla para sopa y cocina a fuego lento durante varias horas. Si ves que se forma una espuma blanca en la parte superior, quítala con una espumadera o un cazo.
Deja que se enfríe, retira los trozos de pollo y guarda la carne para cualquier receta que requiera pollo desmenuzado -como estas Quesadillas con pollo BBQ y arroz-, cuela el caldo para desechar los huesos y cualquier verdura restante. Puedes utilizar el caldo a lo largo de la semana o congelarlo en recipientes herméticos o bolsas de congelación. ¡Recuerda etiquetarlos con la fecha!
Cocinar los granos en caldo en lugar de en agua marcará la diferencia en el sabor – ¿sabías que este es uno de los grandes secretos para preparar una deliciosa paella española?