¡Prueba este plato costarricense para el desayuno, el almuerzo o la cena! Esta receta se prepara con frijoles negros y nuestro Arroz Blanco Mahatma® mezclados con cebollas salteadas, pimientos, salsa inglesa, salsa picante y cilantro picado. La mejor parte: tocino desmenuzado para decorar.
Paso 1
Prepara el arroz de acuerdo a las instrucciones del paquete.
Paso 2
Calienta el aceite en una cacerola o sartén y saltea la cebolla y el pimiento.
Paso 3
Agrega los frijoles y cocina por 2 minutos más.
Paso 4
Añade el arroz y mezcla bien, cocina por otros 3 minutos.
Paso 5
Agrega la salsa Worcestershire, la salsa picante (si lo deseas) y el cilantro picado. Sazona con sal y pimienta, al gusto. Mezcla bien hasta incorporar todos los ingredientes y cocina por otro minuto.
Paso 6
Decora con el tocino desmenuzado.
Se dice que puedes aprender mucho sobre una cultura comiendo su cocina. Originario de Costa Rica, este plato de arroz y frijoles negros es un acompañamiento esencial para cualquier momento del día. Se dice que la combinación de la legumbre y el grano es una representación de la cultura mestiza que existe en muchos países de América Central debido a las legumbres producidas por las culturas precolombinas y el grano de arroz traído por los españoles.
Servido junto con un par de huevos fritos o cocinados de tu forma preferida, el Gallo Pinto es una comida que se puedes disfrutar en el desayuno, pero también se puede comer de almuerzo o cena. Incluso puedes completar con otros ingredientes y para rellenar una tortilla de maíz y degustar un burrito. Esta recomendación es ideal para reinventar esta receta si cocinaste más cantidad de la que planeabas y te queda un poco para el resto de la semana.
Si te gusta el arroz con frijoles con un sabor muy picante, agrega salsa extra picante o sirve decorando con hilos de sriracha. Además, siéntete libre de cambiar el pimiento por unos chiles picantes.
Como verás en la foto de esta deliciosa receta, se sirve con un poco de tocino crujiente coronando la mezcla de arroz y legumbres. Cocina el tocino por separado, es habitual que libere una gran cantidad de grasa. De ser necesario, retira el exceso, pero asegurase de reservar un poco en el sartén para freír los huevos. Esto hará que queden especialmente sabrosos. Te recomendamos cocinar el tocino hasta que su textura sea crujiente.