Sigue esta receta de la Chef Pati Jinich y aprende a preparar una guarnición sabrosa con Arroz Blanco Mahatma® esponjoso y unos plátanos fritos dorados a la perfección.
Paso 1
Disponga el arroz en un bol grande, cúbralo con agua caliente y déjelo en remojo durante entre 5 y 10 minutos. Pasado este tiempo, escúrralo, enjuáguelo con agua fría y escúrralo de nuevo.
Paso 2
A continuación, caliente el aceite a fuego medio-alto en una cacerola, añada el arroz y cocínelo durante 2 o 3 minutos, removiendo suavemente. Después, incorpore la cebolla y cocine de nuevo, removiendo constantemente, durante unos 3 o 4 minutos más. Finalmente, agregue el caldo de pollo, el apio, el perejil, el zumo de lima, la sal y el chile.
Paso 3
Caliéntelo todo junto hasta llevarlo a ebullición, tape la olla, reduzca el fuego a temperatura baja y cocine durante unos 15 o 20 minutos, hasta que el arroz esté bien cocido y haya absorbido todo el líquido.
Paso 4
Retire entonces el resultado del fuego y deje reposar, tapado, durante entre 5 y 10 minutos. Esponje el arroz con un tenedor antes de servirlo y acompáñelo con los plátanos fritos (receta más abajo) por encima y crema agria a un lado si lo desea.
Paso 5
En primer lugar, pele los plátanos y córtelos en rodajas diagonales de 1/4 de pulgada de grosor.
Paso 6
Añada aproximadamente 1/4 de pulgada de aceite en un sartén y caliéntelo a fuego medio. Después, agregue los plátanos al aceite caliente y fríalos durante aproximadamente 2 minutos por cada lado, o hasta que se doren.
Paso 7
Cuando los plátanos estén bien cocinados, retírelos del aceite y escurra el exceso de grasa en un plato cubierto con papel absorbente.
Este plato de arroz y plátanos es una sencilla opción que encantará y dejará satisfechos a todos los comensales. El arroz se infunde con el sabor del caldo de pollo, los chiles serranos y las especias para conseguir un resultado muy sabroso. Por otra parte, los plátanos fritos añaden una capa de dulzura, mientras que la crema agria añade un punto ligeramente agrio y ácido. Ten en cuenta que para conseguir el equilibrio perfecto de sabores, es clave que elijas los plátanos adecuados.
¿Cómo saber si un plátano está maduro? Escoge siempre aquellos que tengan la piel de un tono casi negro, ya que están en su punto máximo de dulzura. Aún así, debes tener en cuenta que al apretarlos han de estar ligeramente firmes. Los plátanos verdes son más salados, y se utilizan en la elaboración de otras recetas, como los tostones.
Si es la primera vez que vas a freír plátanos, no te preocupes: estos consejos te ayudarán a freírlos a la perfección, consiguiendo un exterior crujiente y caramelizado, y una textura cremosa en el interior.
– Elige la fruta adecuada: recuerda que debes usar plátanos maduros.
– Utiliza aceites de sabor neutro: los aceites de canola o los vegetales son las mejores opciones. Este tipo de aceites tienen un punto de humeo alto y no añadirán ningún sabor adicional a tus plátanos. Es muy importante que utilices la cantidad suficiente de aceite para cubrir el fondo del sartén.
– Pon el aceite a fuego medio: si lo haces a fuego lento, los plátanos se quedarán muy blandos, mientras que si lo haces a fuego alto, es muy probable que se quemen.
– Fríe en tandas: las rodajas deben estar lo suficientemente separadas unas de otras para que se caramelicen y no se apelmacen.
Ahora que ya sabes cómo freír correctamente los plátanos, prueba a preparar algunas de nuestras recetas en las que se utiliza este ingrediente caribeño. ¿Te atreves con este Arroz con coco y plátano frito?